Quien prendió la bengala culpó al custodio que no lo revisó antes de ingresar.
El custodio culpó al encargado del local que dejó cerradas las puertas de emergencia.
El encargado culpó al dueño por no tener el local en condiciones.
El dueño culpó al gobierno de la ciudad por no inspeccionar las instalaciones adecuadamente.
El gobierno de la ciudad culpó a todos.
Todos culparon a Kirchner.
A quién culparás esta vez, Néstor?
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